miércoles, 7 de mayo de 2014

RESEÑA DEL LIBRO QUE ESTOY ESCRIBIENDO


Con este proyecto no pretendo una obra literaria, ya que no soy profesional de la literatura. Amo los libros y disfruto escribiendo, es algo que  me sale del alma. Lo único que deseo es transmitir humildemente unas experiencias y aprendizajes de mi vida, con la intención de que puedan llevar un mensaje de esperanza y superación.
El 15% de el dinero que se reciba  por las ventas  se donará a  ONG's relacionadas con la prevención del alcoholismo y el apoyo a víctimas de la violencia doméstica.



El libro será un ensayo autobiográfico en el que se narra en primera persona la historia real de una niña campesina que vive en el seno de un hogar convulso, en el que el alcoholismo, la violencia doméstica, y las desviaciones sexuales enfermizas de su padre marcan de por vida a la protagonista.

Dicha historia se desarrolla, entre un país de Sudamérica y España.
Son cuatro acontecimientos principales los que marcan diferentes etapas a lo largo de su vida y que conducen a experiencias de cambio personal.Un espíritu de rebeldía e inconformismo se desata lentamente en su interior, la idea de escapar de aquella pesadilla está cada vez más clara en sus pensamientos, hasta convertirse casi en una obsesión. Es así como, desafiando las más extremas circunstancias, la protagonista consigue que la fuerza de sus pensamientos y sus deseos se impongan a un destino que parecía ya trazado.
Las luchas internas, el tesón, la esperanza, las metas alcanzadas, los fracasos, las decisiones erróneas, la búsqueda espiritual, la continua necesidad de cultivar su intelecto a través de los libros, el amor, el amargo sabor del engaño y la traición, la aventura, los sueños por conseguir  y el amor por sus hijos  son una constante a lo largo de su vida.
La niña se transforma en una mujer intrépida, perseverante, que no tiene miedo, siempre buscando con ahínco y de manera obstinada cumplir todos sus sueños, y así se rodea de gente con poder, políticos, personas cultas, altruistas, místicos espirituales, gentes que se consideraban a sí mismos buenas personas por predicar una religión o una filosofía, pero que en realidad distaban mucho de serlo si se valoraba su testimonio de vida.
La primera etapa, infancia y adolescencia, está cargada de sin sabores, vicisitudes e inconformismo.


La  segunda etapa está marcada por los grandes logros conseguidos en el ámbito profesional y social, el gran compromiso religioso después de una llamada " Conversión", una experiencia religiosa muy alineada al opus y a la renovación católica, seguida de muchas  otras búsquedas espirituales poco fructíferas, en diversas filosofías e ideologías. El  fracaso de su matrimonio, en el que conoció  las mieles del  amor, el  maltrato psicológico, el engaño  y la mentira, derivó en una actitud frente a la vida enmarcada dentro de un pensamiento liberal, práctico y  nihilista.



En la tercera etapa  de su vida destaca su lucha por sobrevivir con sus 5 hijos. Una   actitud fría, calculadora y pragmática, hacia todo lo relacionado  con los hombres.

Se siente  decepcionada de los sistemas políticos, de los líderes religiosos. Pero  aún   continua creyendo en la bondad que se encuentra  intrínseca en la humanidad, pese a su nihilismo.  Se considera a sí misma libre pensadora, vive feliz con su propia filosofía de vida, y respeta profundamente la libertad de los demás.


La cuarta etapa  comienza con la muerte de su padre, el inicio de la crisis económica, la quiebra de su pequeña empresa, las necesidades afectivas que empiezan a hacerse notar en el atardecer de su vida. 

Dos grandes acontecimientos  dan un giro total a  su existencia que le llevan a un  nuevo y profundo cambio personal.



Tanto buscar, tanto hacer, tanto ambicionar, para al final llegar a la simple conclusión de que lo único real es el eterno presente, que no somos más que el resultado de lo que pensamos, que todo es circunstancial en la vida, que nada es para siempre, que lo bueno o lo malo no es más que el resultado  de una actitud mental frente a la vida, que toda la riqueza, el poder, las filosofías y las religiones no son nada, mientras que el odio, la falta de solidaridad, la ausencia de humanidad y el vacío existencial gobiernen nuestras vidas.
Esta historia de auto-superación personal desea humildemente trasmitir un mensaje de solidaridad, de amor por la vida y de agradecimiento por lo que se nos da minuto a minuto 
"Dormía..., dormía y soñaba que la vida no era más que alegría. Me desperté y vi que la vida no era más que servir... y el servir era alegría"    -TAGORE-


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